La audiencia pública realizada en Bogotá y convocada por el concejal Jairo Avellaneda y el Sindicato de Trabajadores del Cannabis (Sintrabacann), reunió a concejales de la bancada cannábica, representantes de pueblos indígenas, expertos en salud, académicos y organizaciones del sector del cannabis de diferentes partes del país como Bogotá, Cali, Medellín y Cauca. Asimismo, hizo presencia lideres de organizaciones de Argentina y Chile.
Se discutió sobre la proyección económica del cannabis en el país por la capacidad de variedad en productos que pueden desarrollarse de este, en especial el cáñamo, una de sus variedades con bajo contenido de THC (tetrahidrocannabinol), que puede transformarse en fibras para textiles, papel, cuerdas y bioplásticos, así como en insumos para la construcción sostenible y ecológica reconociendo el potencial industrial, sostenible y medicinal.
En el ámbito de la salud, se destacó los aportes en el uso terapéutico para el manejo del dolor crónico, la ansiedad, el insomnio, la depresión y otros padecimientos, así como en el alivio de síntomas asociados a tratamientos oncológicos.
Al mismo tiempo, se pidió una regulación clara y prácticas orientadas a la reducción de riesgos, en paralelo pedagogía para socializar lo que se puede obtener como industria lícita y no solo como consumo. Además, dicha pedagogía que enseñe sobre lo que puede generar en la salud su uso indebido o excesivo y los posibles efectos adversos en la salud. En ese sentido, se insistió en la necesidad de promover su aprovechamiento de forma responsable y segura, de manera que proteja la salud pública y, a la vez, impulse la economía y el desarrollo de una industria sostenible.
“El cannabis, cuyo uso más reconocido por la población es en la medicina alternativa, es también una materia prima versátil que sirve para la elaboración de cosméticos, alimentos, aceites esenciales, biocombustibles y bioinsumos agrícolas, generando así oportunidades para cadenas productivas sostenibles” señaló, Juan Andrés Leguizamo, presidente del Sindicato Nacional de Trabajadores del Cannabis (Sintrabacann).
Finalmente, se coincidió en que el desarrollo de esta industria debe impulsarse a través de un modelo económico lícito que conecte Industria, salud, control de riesgo y empleo. La audiencia concluyó con un llamado a dejar atrás los estigmas y reconocer al cannabis como un recurso valioso para la economía, capaz de aportar bienestar y desarrollo.
